Le Grand Tango. Segundo concierto del décimo ciclo

PSMR, viola; Pablo López Callejo, piano
El compositor y bandoneonista argentino Astor Piazzolla es una de las figuras más singulares de la música occidental de después de la Segunda Guerra Mundial. Aunque creció bajo la influencia de la música de tango de su tierra natal, su ambición era convertitrse en un compositor clásico en el sentido convencional del término, hasta que su profesora de composición en París, la famosa Nadia Boulanger, le convenció en los años 50 de que volviera al tango. El resultado fue una combinación única de música escrita e improvisación espontánea, casi siempre centrada en su faceta como intérprete de bandoneón. Piazzolla escribió pocas obras dedicadas a otros músicos, probablemente debido a ese intercambio entre la partitura escrita y su personal acercamiento jazzístico a la música. Uno de esos pocos casos lo constituye este Grand Tango, escrito para el vio- loncellista ruso Mstislav Rostropóvich en 1982, cuya interpretación de la partitura llevó al autor a observar que «sentir el tango no es una cuestión de haber nacido en Argentina». Concebido como lo que podría denominarse «tango de concierto», se trata de una obra amplia y ambiciosa estructurada en tres secciones (rápido-lento-rápido), a lo largo de las cuales el autor desarrolla un lenguaje particular caracterizado por la fusión de la tradición de la música de cámara clásica, estilos populares y urbanos, el jazz, la improvisación y la experimentación..